lunes, 4 de julio de 2011

Periodismo y Corrupcion

Periodista es la persona que se dedica profesionalmente al periodismo, en cualquiera de sus formas, ya sea en la prensa escrita, radio, televisión o medios digitales. Su trabajo consiste en descubrir e investigar temas de interés público, contrastarlos, sintetizarlos, jerarquizarlos y publicarlos. Para ello recurre a fuentes periodísticas fiables y verificables. Así elabora sus artículos, que pueden tomar varias formas para su difusión: oral, escrita, visual.

Un periodismo como el que nos envuelve actuamente, con medios radiofónicos y televisivos de los que está pendiente la inmensa mayoría de la población, si está corrupto atenta como ninguna otra profesión a los fundamentos de la democracia y de la ética civil más elemental, además de ir contra la inteligencia como también en otro tiempo iba dirigida
La Imprenta apareció en Santo Domingo, en 1774, siendo el 5 d abril de 1821 cuando se publico el primer periódico dominicano, en la ciudad primada, El Telégrafo Continental, el que fue dirigido por Antonio María Pineda, natural de Las Isla Canarias, España, radicado en nuestro país, en éste colaboró activamente el Lic. José Núñez de Cáceres, quien para ese entonces gestionaba la liberación de la Patria del tutelaje Español

ay dos clases de Periódicos; el Periódico de opinión y el periódico de información, que es el típico de nuestros días, donde se combina con frecuencia los dos tipos. Hay también paródico personalista, controlado por una persona o familia para representar sus ideas y plataforma, y por último, el tipo de periódico de empresa anónima o sociedad de acciones" (Manuel Amiama, resumen del cursillo de periodismo distado en UASD, agosto 1941)

Listín DiarioFue el Boletín Comercial el primer periódico que ofreció las noticias de los sucesos que ocurrían en el extranjero.

Por todo esto y mucho mas, yo creo que el periodismo debería reconciliarse con la gente, el periodismo tiene la obligación de auto-regularse y auto-purgarse.
La información distorsionada y la mentira son tan o mas peligrosas que las balas disparadas por policías corruptos. Una bala mata a una persona, una información falsa puede matar muchas, como podemos apreciar viendo lo que paso en Irak. Si bien esta claro que hay muchos periodistas independientes y serios, también esta claro que hay otros que son funcionales a otros intereses.

Los periodistas (y no solo ellos, sino también los empresarios que manejan los conglomerados mediáticos) deberían hacer una autocrítica, es correcto y necesario ya que nadie duda que sea realmente el 4to poder (en ocasiones con mas peso que alguno de los otros 3) y ese poder debería ser usado en beneficio de nuestra sociedad, ya que la gran mayoría de la población no tiene otra forma de entender la realidad que no sean los medios.
Son el único recurso que tenemos para no estar a merced de intereses
sucios y oscuros que van cambiando de cara pero que siempre están al acecho.
Investiguen quienes fueron cómplices, quienes guardaron silencio o distraían a la gente mientras se aprobaban las leyes que nos trajeron a esta realidad.
Solo eso.

Ya han sido varios los casos escuchados en la prensa nacional en los últimos años como Nepotismo en la CDEEE, Plan Renové, Denuncias contra Pro consumidor, La Cementera en los Haitises, y la justicia dominicana ha hecho muy poco, imponen penas muy flexibles como prisión domiciliaria, mientras que los delincuentes comunes se les violan sus derechos humanos y pasan hasta aberraciones en las cárceles.

La corrupción tiene varias matices: Falta de Educación sobre ética y moral, bajo sueldo de los servidores públicos, falta de aplicación de leyes como presupuesto, inversión publica, etc., falta de transparencia gubernamental, ausencia o ineficientes controles internos o externos, clientelismo político.

La República Dominicana ha sido, en un pasado reciente, uno de los países latinoamericanos que más respetaba el ejercicio del periodismo. Sin embargo, en los últimos años, la situación de la libertad de expresión ha ido empeorando paulatinamente; tanto que, para Reporteros Sin Fronteras, tras una mejora coyuntural, ha descendido hasta su peor posición en la clasificación. A pesar de que este año no fue asesinado ningún periodista a causa de su profesión, a diferencia de lo ocurrido en 2006, todas las informaciones sobre la República Dominicana advierten de que se está viviendo un rebrote de la violencia contra los medios.

El Comité para la Protección de los Periodistas

Se hace eco de los casos de Erica Guzmán, corresponsal del diario nacional Hoy y la estación Radio Popular en la ciudad oriental de Samaná, que afirmó haber recibido varias llamadas anónimas amenazando de muerte a la periodista y a su familia. Robert Vargas, director de la publicación Ciudad Oriental, fue atacado y amenazado por un grupo de gente molesta por la publicación de informes sobre prostitución y mala conducta en bares en la ciudad de Santo Domingo. A pesar de la denuncia pública de la agresión, las amenazas continuaron y poco después otro grupo se reunió fuera de su domicilio, y al menos una persona realizó varios disparos al aire.

El periodismo es un servicio público y administra uno de los recursos más valiosos y poderosos de las sociedades modernas: las noticias.

¿Es corrupto el periodista que trabaja dentro de este esquema? No lo es necesariamente, ni la mayoría de las veces, pero sin dudas podría desarrollar su profesión en un medio que le proporcionara mayores libertades. Aun con las limitaciones que la empresa impone, se debe aspirar a un ejercicio honesto de la profesión; a que el periodista refleje la verdad, que actúe con equilibrio en los reportajes y en los espacios de opinión, en lugar de plegarse a los intereses del medio periodístico para el que trabaja.

El periodista en muchos países ha sido víctima de la violencia, en la mayoría de los casos por denunciar al crimen organizado; pero también los hay que han caído por su complicidad con los rufianes. En muchos medios de comunicación: prensa, radio y televisión de todos los países del mundo, también impera la corrupción.

Por todo esto y mucho mas, yo creo que el periodismo debería reconciliarse con la gente, el periodismo tiene la obligación de auto-regularse y auto-purgarse.
La información distorsionada y la mentira son tan o mas peligrosas que las balas disparadas por policías corruptos. Una bala mata a una persona, una información falsa puede matar muchas, como podemos apreciar viendo lo que paso en Irak. Si bien esta claro que hay muchos periodistas independientes y serios, también esta claro que hay otros que son funcionales a otros intereses.

Los periodistas (y no solo ellos, sino también los empresarios que manejan los conglomerados mediáticos) deberían hacer una autocrítica, es correcto y necesario ya que nadie duda que sea realmente el 4to poder (en ocasiones con mas peso que alguno de los otros 3) y ese poder debería ser usado en beneficio de nuestra sociedad, ya que la gran mayoría de la población no tiene otra forma de entender la realidad que no sean los medios.
Son el único recurso que tenemos para no estar a merced de intereses
sucios y oscuros que van cambiando de cara pero que siempre están al acecho.
Investiguen quienes fueron cómplices, quienes guardaron silencio o distraían a la gente mientras se aprobaban las leyes que nos trajeron a esta realidad.
Solo eso.

Ya han sido varios los casos escuchados en la prensa nacional en los últimos años como Nepotismo en la CDEEE, Plan Renové, Denuncias contra Pro consumidor, La Cementera en los Haitises, y la justicia dominicana ha hecho muy poco, imponen penas muy flexibles como prisión domiciliaria, mientras que los delincuentes comunes se les violan sus derechos humanos y pasan hasta aberraciones en las cárceles.

La corrupción tiene varias matices: Falta de Educación sobre ética y moral, bajo sueldo de los servidores públicos, falta de aplicación de leyes como presupuesto, inversión publica, etc., falta de transparencia gubernamental, ausencia o ineficientes controles internos o externos, clientelismo político.

La República Dominicana ha sido, en un pasado reciente, uno de los países latinoamericanos que más respetaba el ejercicio del periodismo. Sin embargo, en los últimos años, la situación de la libertad de expresión ha ido empeorando paulatinamente; tanto que, para Reporteros Sin Fronteras, tras una mejora coyuntural, ha descendido hasta su peor posición en la clasificación. A pesar de que este año no fue asesinado ningún periodista a causa de su profesión, a diferencia de lo ocurrido en 2006, todas las informaciones sobre la República Dominicana advierten de que se está viviendo un rebrote de la violencia contra los medios.

El Comité para la Protección de los Periodistas

Se hace eco de los casos de Erica Guzmán, corresponsal del diario nacional Hoy y la estación Radio Popular en la ciudad oriental de Samaná, que afirmó haber recibido varias llamadas anónimas amenazando de muerte a la periodista y a su familia. Robert Vargas, director de la publicación Ciudad Oriental, fue atacado y amenazado por un grupo de gente molesta por la publicación de informes sobre prostitución y mala conducta en bares en la ciudad de Santo Domingo. A pesar de la denuncia pública de la agresión, las amenazas continuaron y poco después otro grupo se reunió fuera de su domicilio, y al menos una persona realizó varios disparos al aire.

El periodismo es un servicio público y administra uno de los recursos más valiosos y poderosos de las sociedades modernas: las noticias.

¿Es corrupto el periodista que trabaja dentro de este esquema? No lo es necesariamente, ni la mayoría de las veces, pero sin dudas podría desarrollar su profesión en un medio que le proporcionara mayores libertades. Aun con las limitaciones que la empresa impone, se debe aspirar a un ejercicio honesto de la profesión; a que el periodista refleje la verdad, que actúe con equilibrio en los reportajes y en los espacios de opinión, en lugar de plegarse a los intereses del medio periodístico para el que trabaja.

El periodista en muchos países ha sido víctima de la violencia, en la mayoría de los casos por denunciar al crimen organizado; pero también los hay que han caído por su complicidad con los rufianes. En muchos medios de comunicación: prensa, radio y televisión de todos los países del mundo, también impera la corrupción.

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